Los mejores colchones para practicar sexo
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El colchón ideal para cada persona es como siempre cuestión de gustos, pero existen varios criterios universales en el comportamiento de un colchón que resultan determinantes a la hora de tener sexo. En esta guía vamos a analizar varios colchones en función de esos factores para poder elegir el más adecuado para tus noches de placer.
Efecto rebote
El rebote o la respuesta de un colchón se mide con su reacción a presionarlo y comprimirlo. Un colchón estable o con un bajo efecto rebote tiene un comportamiento de absorción del impacto para que la persona encima del colchón sienta el mínimo movimiento posible. Por el contrario un colchón de alto efecto rebote será más sensible a los movimientos en su superficie, generando un efecto brinco en el cuerpo que reposa sobre él. Esta característica del colchón tiene un papel importante durante el acto sexual que puede facilitar el movimiento o trabajar contra él. Generalmente los colchones ideales para dormir en pareja sin que los movimientos a un lado de la cama se reflejen en el otro son de bajo efecto rebote. Además, el efecto rebote del colchón además de por su intensidad se puede medir por su rapidez, siendo ideales los colchones que se adaptan rápidamente sin ofrecer demasiada resistencia a los movimientos del cuerpo y los cambios de postura.
Ruido
Otro de los factores más determinantes en un colchón a la hora de utilizarlo para el sexo es el nivel de ruido que emite. Ya no solo por mera discreción de cara a las personas que nos rodean, un ruido excesivo en un colchón puede resultar molesto y desconcertante también para los propios implicados en el acto sexual. Algunos colchones con muchos años de uso, con componentes poco adecuados o de baja calidad pueden resultar muy escandalosos durante el sexo, resultando en un efecto deserotizante. El colchón ideal para el sexo debe ser lo más silencioso posible.
Homogeneidad en la firmeza
Que la superficie de descanso presente una firmeza homogénea tanto en el centro como en los bordes, es determinante no solo para el descanso adecuado, sino que también resulta fundamental para que algunas posturas sexuales resulten más cómodas y placenteras. Algunos colchones de baja calidad presentan una dureza más baja en el borde con un comportamiento muy inestable para el acto sexual. El mejor colchón para no interferir en la comodidad durante el acto sexual debe tener un borde robusto que no se hunda con la presión, el peso y el movimiento.
Acogida
El confort es otro aspecto determinante para una sensación placentera y relajante que conduzca a una actividad sexual cómoda. Es muy importante elegir un colchón con una sensación de acogida correcta para ambos componentes de la pareja y así evitar puntos de presión que incomoden durante el acto sexual.
Durabilidad
Por último resulta determinante la robustez y durabilidad de cama. Que un colchón nuevo cumpla con todas las características descritas anteriormente no sirve de mucho si se deteriora de manera rápida. Por ello, la calidad y resistencia de un colchón resulta determinante para asegurar una larga vida útil proporcionando las condiciones adecuadas para un vida sexual activa y placentera.
Colchones de agua
Los colchones de agua, a pesar de estar muy presentes en el imaginario colectivo como una superficie ideal para tener sexo, generan mucho ruido por su interior líquido. Es cierto que el agua se amolda perfectamente a la forma del cuerpo sin oponer ninguna resistencia y absorbiendo el impacto rápidamente, sin embargo, estos colchones ofrecen también un alto efecto rebote y una independencia de lechos muy baja, por lo que, aunque resulten confortables para el acto sexual, presentan también muchos inconvenientes a la hora de dormir en pareja.
A continuación hemos elaborado una lista con los colchones que puntúan más alto en las cualidades necesarias para favorecer una vida sexual activa:
